Antes de adentrarse en el mundo de las inversiones, es crucial que cada individuo sepa quién entre los tipos de inversor que existen. Esta no es una pregunta puramente filosófica; descubrir tu perfil de inversor te ayudará a enfocar tu búsqueda de productos financieros, planificar tu cartera y elegir estrategias de inversión adecuadas. Aunque cada inversor es único, podemos agruparlos en varias categorías: pre-inversores, inversores pasivos, inversores activos y traders. Para inspirarte, puedes estudiar a famosos inversores como Warren Buffett, Peter Lynch, Benjamin Graham, y Michael Burry
La Importancia de Conocer los tipos de Perfil de Inversor existentes
Conocer cual de los tipos de inversor es el tuyo es esencial para desarrollar una estrategia de inversión eficiente. Al identificar tus debilidades y fortalezas, puedes configurar un plan que se ajuste a tus necesidades y objetivos. Además, tu perfil puede cambiar con el tiempo a medida que ganas experiencia en el mercado. Revaluar periódicamente tu perfil te permitirá adaptarte y seguir creciendo como inversor.
Es importante tener en cuenta que la experiencia que vas ganando es un factor crucial en esta evolución. Nada aporta tanto valor a un inversor como su operativa durante años en el mercado financiero. Por lo tanto, conocer tus fortalezas y debilidades te permitirá tomar decisiones informadas y efectivas en tu camino hacia el éxito.
El Pre-Inversor: El Primer Paso en el Mundo de la Inversión
Si estás leyendo este artículo, es probable que tu perfil actual sea el de pre-inversor. Un pre-inversor es alguien que está pensando en invertir, pero aún no ha dado el paso. Estos individuos suelen tener conocimientos mínimos sobre temas financieros y enfocan sus ingresos principalmente en el gasto y consumo. Suelen tener un plan de jubilación básico abierto por un agente de fondos de inversión en su banco. Sin embargo, su conocimiento o preocupación por los temas financieros es mínimo, y no orientan sus pensamientos a la inversión, lo que hace que la gestión de su patrimonio/ahorros, sea susceptible de considerables mejoras.
¿Es este tu caso? ¿Te preguntas en qué gastar tu dinero o cómo generar nuevos ingresos? ¿Eres un pre-inversor que no se plantea pasar a otro nivel de inversor debido a una fuerte aversión al riesgo? Debes saber que su situación financiera, su vida, es susceptible de mejorar. ¿Nota ese cosquilleo, esa curiosidad de aventura en el proceloso mar de la bolsa? ¿Tal vez es momento de subir de nivel como inversor?
Pasivo: el más común de los tipos de inversor
El primer escalón inevitable, diríamos que inevitablemente necesario, es el de la estrategia pasiva. Aunque haya quien se quiera saltar este paso y pasar a ser un inversor activo, es desaconsejable. Esto sería una forma de estrellarse y huir de la bolsa para nunca más querer volver.
En este nivel, el inversor es ciertamente cauteloso y anda indeciso en cuanto a los movimientos que va dando; necesita ser así para sentir algún tipo de seguridad en sus pasos financieros. No exageramos si afirmamos que una gran mayoría de los inversores existentes pertenecen a este tipo. Es el nivel aceptado y promocionado por cualquier institución financiera o centros/academias formativas. Es el perfil estándar más aceptable para entrar en el mercado.
Estrategia Pasiva y su Planificación
La estrategia pasiva se basa en puntales básicos de planificación financiera, tales como tener en propiedad su vivienda, planes de pensiones y el ahorro del 10% de sus ingresos. Si esta estrategia se inicia bastante pronto, como sucede (preferentemente) cuando se empieza a trabajar, tiene alta probabilidad de que no sea necesario evolucionar a otro nivel en su tipo de inversor para alcanzar objetivos.
El inversor pasivo suele estar identificado con personas sin tiempo para destinarlo a la inversión, ya sea por trabajo, negocios u ocupaciones familiares. Es normal que el inversor pasivo sea el más usual ya que la gran mayoría de personas tienen su tiempo completo con esas actividades.
Asesoramiento y Decisiones
El inversor pasivo, por esa poca disponibilidad de tiempo en la que dedicarse a estrategias de inversión, toma la decisión de contratar a expertos en inversión que le asesoran, estudian y planifican dónde invertir su dinero y cómo moverlo. Estos expertos son conocedores no solo de los mercados y de cuantos productos financieros puedan incluir en la planificación financiera, sino de la propia naturaleza del inversor pasivo. Así, la captación y comprensión de dichos inversores se logra con estrategias simples y fáciles de asimilar y entender por cualquiera.
Ejemplos de estrategias de inversión pasiva son la compra en fondos mutuos, acciones especialmente para dividendos o compra de bienes raíces. Entre más paciencia y a más a largo plazo. se mueva esta estrategia, más índice de éxito tiene y mayores son las ganancias. Sin embargo, siempre estará sujeta a cumplir con la costumbre de ir contribuyendo, aportando ahorros hasta alcanzar al cabo de décadas la ansiada independencia financiera.
Disciplina y Riesgos
Para alcanzar esa recompensa es necesario ser disciplinado con el capital, destinándolo a ese ahorro e inversión, en vez de lo que hacen los pre-inversores que destinan todo a consumo. Con respecto a los inversores activos, la estrategia pasiva es claramente desfavorable; tiene más riesgo y menos rendimiento que aquellos. Simplemente esperan que el mercado se mueva en la dirección deseada de forma sostenida, su estrategia no aporta valor por razón de su habilidad. Así, si en ciclos alcistas le dan gran rendimiento, en mercados bajistas se encuentran con rendimientos bajos o negativos.
De esta forma, el inversor pasivo está sometido al vaivén de las olas del mercado, soportando los periodos de volatilidad sin reaccionar, y esperando que al final del periodo de inversión, cuando rescate su cartera, el mercado haya subido considerablemente más de cuando se inició la inversión por primera vez.
Ventajas y Comparaciones del Pasivo con otros tipos de inversor
Sin embargo, y a pesar de ello, son más los puntos a favor que en contra que se encuentran en una estrategia pasiva, con lo que sigue siendo aceptable para muchos inversores estar en este tipo. Si bien el inversor activo es superior al pasivo, el pasivo lo es con respecto al no inversor o pre-inversor. Este último se queda descolgado en su lucha contra la inflación; sus ahorros intactos en teoría van depreciándose por la subida de precios, mientras los inversores pasivos rentabilizan su dinero en capitalización compuesta (cada euro generado, por ejemplo, en intereses se acumula para a su vez generar más interés).
Naturaleza del Inversor Pasivo
La naturaleza del inversor pasivo se puede visualizar como aquel que toma una posición en un activo con potencial de revalorización o buenos fundamentos y luego se sienta a esperar lo que tenga que pasar; no ejerce un control sobre su patrimonio que, por ejemplo, le permita encauzarlo hacia otros mercados ante situaciones de crisis. Deja pasar posibilidades de rentabilizar más su capital, amén de evitar que se deprecie en ciclos bajistas.
El Inversor Activo: Maximización de Rendimientos
Evolucionando desde el inversor pasivo, llegamos al inversor activo, que plantea la gestión de su patrimonio como un negocio. El inversor activo obtiene todas las ventajas del pasivo, pero gracias a su habilidad, limita o elimina sus desventajas para lograr un mayor rendimiento. El inversor activo no depende de que el mercado sea alcista o de determinadas condiciones para ganar; su limitación es su habilidad, experiencia y conocimiento del mercado para superarlo. Al comprender que tipos de inversor existen, el activo se diferencia por su enfoque proactivo y estratégico en la gestión de sus inversiones.
Características del Inversor Activo
De los tipos de inversor, el activo está en el mercado, lo tiene en mente y siempre está maquinando, pensando para operar, mover su dinero, analizar, estudiar, descartar y perfeccionar su estrategia. Siempre está activo. Es un trabajo de dedicación y duro, y por eso no todos pueden ser inversores activos.
Los inversores activos enfocan su esfuerzo en la creación de riqueza desde el rendimiento del capital. Así, las pequeñas diferencias en las tasas de crecimiento durante largos períodos de tiempo hacen grandes diferencias en la riqueza, diferencias mucho más grandes de las que se podrían lograr trabajando para el próximo aumento de sueldo. El factor más importante para construir su patrimonio no es cuánto gana, sino cuánto gana su dinero y cuánto tiempo se acumula.
Planificación y Estrategia
Para conseguir esto, el inversor activo crea un plan estratégico para explotar las ineficiencias existentes en el mercado. El término para esto se conoce como “ventaja” y es idéntico a la ventaja competitiva que busca un emprendedor en los negocios. La ventaja competitiva debe agregar más valor del que quitan los costos de transacción, o no obtendrá ganancias. Al entender que tipos de inversor existen, se puede apreciar cómo el activo maximiza su ventaja competitiva.
Identificación de Activos Infravalorados
¿Y dónde están esos activos infravalorados? Esto es algo que se logra cuantos más años de experiencia y conocimiento se acumulen. No tenemos una X en el mapa predefinido para que los inversores sepan dónde está el chollo. Las estrategias de inversión activas son infinitas, tantas como activos y/o inversores existan. El uso del análisis fundamental y el análisis técnico son de considerable ayuda como apoyo para desarrollar esa sabia experiencia que se logrará.
Esfuerzo y Dedicación
La mejor y más efectiva arma que el inversor activo posee para una estrategia de éxito es la energía y el tiempo dedicados a extraer del mercado esas ineficiencias. Con la inversión activa se obtiene la libertad financiera, pero no es una libertad en la que puedas decir que se obtiene sin hacer nada. De hecho, es un trabajo exigente y duro que requiere de esfuerzo constante.
Más Activo Aún: El Trader
El trader va un paso más allá del inversor activo, operando en marcos temporales muy cortos y basando sus decisiones en el análisis técnico. Los traders son conocidos por su frecuencia y cantidad de operaciones diarias. Este perfil requiere habilidades y conocimientos avanzados, ya que los traders buscan aprovechar movimientos rápidos del mercado.
A diferencia de los inversores, los traders no están interesados en los fundamentos a largo plazo de un activo. Su enfoque es más mecánico y basado en patrones de comportamiento del precio. Esta estrategia puede ser rentable pero también conlleva un alto riesgo.
Diferenciando la Inversión del Trading
Es frecuente querer hacer una distinción entre especulación e inversión, pero esto es una falsa dicotomía, pues todo es especulación. Cada vez que se compra cualquier activo en un mercado, se está especulando con una revalorización del mismo y con un futuro rendimiento. El primero y último fin de la inversión en bolsa es ganar dinero, sea a corto o largo plazo.
La inversión está basada en fundamentos objetivos para la valoración del activo, mientras que lo que se llama especulación se basa en el seguimiento del precio y en alcanzar objetivos, por lo general, a corto plazo. En la inversión, se ha estudiado y analizado el propio activo desde dentro y desde fuera, con la consideración de que en algún momento ese valor se verá reflejado en la cotización. En cambio, la especulación maneja marcos temporales cortos y espera que se den una serie de factores que impulsen el precio hasta el nivel fijado para salir. El único interés del especulador es saber el precio y su movimiento.
El Trader como Especulador Extremo
El trader es una forma extrema de especulador, más parecido a un jugador, y que no atiende tanto al análisis fundamental. No le importa lo infravalorado o sobrevalorado que esté un activo; su mayor preocupación es que el activo se mueva y detectar patrones de comportamiento en su movimiento para sacar partido a su operativa.
Diferencias entre Inversores y Traders
Podemos señalar las siguientes diferencias entre inversores y traders:
Rango Temporal para Operar
El trader opta por una inversión a corto o ultracorto plazo, incluso intradía, manteniendo las posiciones semanas, días, horas o minutos, dependiendo de su marco temporal de actuación. Los traders intradiarios compran y venden en un solo día de negociación. Un inversor, sin embargo, se inclina hacia la inversión a largo plazo, conservando la posición durante años para generar plusvalías.
Riesgo
Un trader asume, incluso espera y desea, que el precio del activo en el que opera se mueva, arriba o abajo, pero que se mueva. Podemos decir que el trader parece insensible al riesgo, convive y cuenta con él, y esto es una diferencia grande con el inversor que busca prioritariamente reducir el riesgo.
Orientación del Negocio
Los traders orientan su actuación en vender por encima de la compra y, apoyados en su habilidad para entrar y salir rápido, realizan cuantas más operaciones puedan. Más operaciones suponen más ganancia, al menos para los buenos traders. Están siempre monitoreando el mercado para detectar algún activo que cumpla patrones de comportamiento del precio en el que puedan hacer sus operaciones. El inversor, orientado en el largo plazo, invierte en el mercado durante un período más largo, y el beneficio proviene en gran medida del poder del interés compuesto, como sucede en el inversor pasivo.
Psicología entre los tipos de inversor
Un inversor es lo suficientemente paciente como para quedarse quieto y aferrarse a una inversión a largo plazo. Mientras tanto, un trader no espera, salta a buscar el mercado, da la bienvenida al riesgo y tiene estudiado su plan de actuación al cual se suele ajustar para operar, al menos mientras funcione. Los traders toman decisiones rápidas y ágiles, rectifican si es necesario porque el mercado se ha dado la vuelta.
Toma de Decisiones
Los inversores pueden tardar mucho antes de decidirse a entrar en una inversión. Estudian mucho los fundamentales que afectan a un bien activo. Los traders pueden atender también a los fundamentales de un activo, pero no les son imprescindibles y se apoyan sobre todo en análisis técnicos utilizando gráficos de precios y otras herramientas. Su toma de decisiones tiende a ser más rápida, pero generalmente ya tienen una estrategia para guiarlos.
Exigencias de Capital
Los traders, para obtener beneficios sustanciales, precisan negociar grandes cantidades del activo, bien sea de una sola vez o bien en base a hacer muy frecuentes operaciones. Normalmente, operan con márgenes establecidos por su broker, atendiendo al mercado y producto a usar, así no necesitan del valor total del activo sino de ese margen de seguridad para operar. Los inversores, por otro lado, deben organizar los fondos por su cuenta. También pueden estar bloqueados en una inversión durante más tiempo, mientras que los traders suelen liquidar posiciones rápidamente; por ejemplo, los intradía dejan todas sus posiciones cerradas al final de cada jornada, lo que ayuda a dormir más tranquilo.
Cómo Identificar tu Estrategia de Inversión
Para determinar tu mejor estrategia de inversión, es esencial analizar tu situación personal y tus objetivos financieros. Pregúntate si tienes el tiempo y la motivación para adquirir habilidades de inversión activa, o si prefieres la estabilidad de una estrategia pasiva. También considera tu tolerancia al riesgo y tus objetivos a largo plazo.
Por ejemplo, si no dispones de tiempo debido a tus ocupaciones, una estrategia pasiva puede ser más adecuada. Por otro lado, si necesitas aumentar rápidamente tu capital para la jubilación, una estrategia activa puede ser necesaria. La clave es evaluar continuamente tu situación y ajustar tu estrategia en consecuencia.
La Evolución del Inversor: Adaptarse y Crecer
Tu perfil de inversor no es estático. A medida que ganas experiencia y conocimientos, tu estrategia puede evolucionar. Esta evolución es natural y beneficiosa, ya que te permite adaptarte a nuevas oportunidades y desafíos en el mercado.
La experiencia ganada con el tiempo es invaluable. Cada operación, cada decisión, te enseña algo nuevo y mejora tu capacidad para tomar decisiones informadas. No tengas miedo de reevaluar tu perfil y ajustar tu estrategia según sea necesario.
Conclusiones finales para los tipos de Inversor existentes
Existen varios tipos de inversores, cada uno con sus propias características y estrategias. Identificar tu perfil es el primer paso para desarrollar una estrategia de inversión exitosa. Ya seas un pre-inversor, un inversor pasivo, un inversor activo o un trader, cada nivel requiere dedicación y esfuerzo.
Analiza tu situación, tus objetivos y tu tolerancia al riesgo para determinar cual de los tipos de inversor eres tú. Recuerda que tu perfil puede cambiar con el tiempo, así que mantén una mente abierta y adapta tu estrategia según sea necesario. Al hacerlo, estarás en el camino hacia una inversión más efectiva y una mayor seguridad financiera.
Espero que este artículo te sea útil y te ayude a identificar tu perfil de inversor y a desarrollar una estrategia adecuada. ¡Buena suerte en tu viaje de inversión!